Mientras que Andrés Roca Rey se fue de vacío.
Hoy se
inició la Feria limeña en honor al Señor de los Milagros, organizada por la
empresa ecuatoriana Citotusa, quien presentó la plaza remozada con stands
decorados, los accesos a los tendidos señalizados y con seguridad contra
incendios, un buen paso en este su primer año de feria.
En la
parte taurina el público que llenó poco más de media plaza, pudo disfrutar a
los dos novilleros peruanos que dieron todo en la plaza con distinto corte y
personalidad. Se vivieron momentos muy emotivos, sin duda tenemos toreros de
gran calidad que en un futuro no muy lejano nos darán gratas noticias en el
mundo taurino.
Se lidió
la ganadería peruana “Santa Rosa”, bien presentada, con diferentes matices,
algunos débiles de remos, otros desarrollaron sentido, y otros con calidad y nobleza.
Andrés
Roca Rey enfundado en un traje salmón y oro. Se fue de vacío, lo vimos con
mucha responsabilidad que no pudo manejarla con solvencia, estuvo
acelerado en algunos momentos, le faltó un poco de tranquilidad para poder
resolver la papeleta a los de Santa Rosa, sin embargo afrontó con mucho valor las embestidas
de su tercer novillo. Perdió alguna oreja por el estoque, recibiendo el cariño
del público presente.
Su primero
herrado con el número 201 con 365 kg, negro de nombre “Salmantino” fue débil de remos con justita fuerza, a quien
le recibió con una larga cambiada. Quitó por gaoneras rematadas con una revolera.
Brindis al público, inicia su faena por alto, el novillo es blando y no tiene
mucho recorrido. Tras dos tandas por la derecha, cambia de mano, el novillo se
vence por el pitón izquierdo. Finaliza su faena con manoletinas, dejando una
estocada delantera, que caló, el novillo demora en caer. Saludos desde el
tercio.
En su
segundo de numero 198, negro con 450 kilos de nombre “Ladero”, quien tuvo el
mismo defecto de meterse por el pitón derecho, arreando y no humilló, con la
muleta lo desarmó, el de Santa Rosa desarrolla sentido, el novillero insiste,
pero no tiene mas tela que cortar y lo despacha con habilidad. Silencio al
torero pitos al novillo.
En su
tercero herrado con el numero 195 con 382kg de nombre “Viñador” lo recibe a
porta gayola, fue el peor de la tarde, manseó y se paró pronto. Brinda a su papá y va a por todas, destapa el cofre y puso la
carne sobre el asador jugándosela literalmente, en los abrigos de las tablas
donde el toro se cobijó, exprimiendo pase a pase en unas tandas que fueron
importantes, lástima que no estuvo fino con la tizona. Recibió aplausos y pitos
al novillo en el arrastre.
Joaquín
Galdós enfundado en vestido de caldero y oro, supo resolver la papeleta con
solvencia y torería. Pudiendo cortar dos orejas una a una, demostrando un gran
avance en su andar taurino ofreciendo unas faenas con mucho empaque y temple. Con
su primero herrado con el numero 202, negro con 417 kg. de nombre “Malagueño”
(fue aplaudido a su salida), lo recibe con lances a la verónica bien ejecutadas
meciendo el capote con lentitud, rematando con una media bien torera. Quita por
chicuelinas, brinda al público, tras tres series de muletazos lentos, cambia de
mano, y ofrece una faena bien hilvanada a base de mucho temple y lentitud,
gustándose y conectándose rápidamente con los tendidos. Deja una estocada
entera y corta una merecida oreja, aplausos al novillo en el arrastre.
Con su
segundo de numero 188 con 382kg. “Tibetano” de nombre, también sale débil como
el primero, lo lance a la verónica, y remata con una lenta larga cordobesa. Emotivo brindis a su mamá, con la muleta inicia su faena de rodillas aguantando mucho, muletazos
muy jaleados, rematados con el de pecho. Otra tanda por la derecha llevándolo largo
y muy firme. Tras un pinchazo en hueso,
deja una buena estocada y le otorgan una oreja.
Con su último herrado con el 174, negro con 425 kilos, salió a porta
gayola, no es lucido con el capote,
brinda a su compañero Andrés Roca Rey, el novillo no rompe, en un descuido, es
cogido sin consecuencias. Lo despacha, silencio, al término del festejo es llevado en hombros y sale por la puerta grande del bicentenario coso.
INCIDENCIAS:
- El
paseíllo se retrasó por 5 minutos.
- El
novillero David Carrasco estuvo de sobresaliente, sin haber salido en el tercio
de banderillas para cortar las embestidas y cumplir su función.
- Faltó
iluminación a la plaza.