Oreja - Oreja, cogidas, y puerta grande en las Ventas!
Muy emocionante fue verlo torear a nuestro
compatriota Andrés Roca Rey en las Ventas de Madris, y escuchar los olés roncos
de los madrileños, que disfrutaron dos importantes faenas del limeño, quien
supo estructurar con cuajo y torería aguantando mucho a las complicadas
embestidas de sus novillos que exigieron mucho, y el torero Andrés resolvió la
papeleta con solvencia.
Andrés Roca Rey alcanzó la gloria en su
presentación en Las Ventas de Madrid, ya que consiguió cruzar a hombros el
umbral de esa Puerta Grande que todos los toreros sueñan y anhelan. El peruano
fue un torrente de coraje, sacrificio, gusto, torería, raza, pundonor, .... y un
sinfín de calificativos que podríamos poner a su tremenda actuación en el
albero venteño, donde recibió hasta tres cornadas. Una oreja cortó del novillo
de su presentación, al que instrumentó dos rotundas y sentidas series sobre el
pitón derecho antes de recibir un volteretón toreando al natural. No dudó Roca
Rey, que se volvió a poner con la misma verdad y capacidad para con un final
poderoso y emocionante, y una estocada fulminante, pasear su primer apéndice de
la tarde.
No podía finalizar de otra forma la función
que con la Puerta Grande del peruano, que ante el sexto, un astifino sobrero de
José María López, volvió a demostrar el por qué de su ambición y querer ser
alguien importante en este mundo. Vibrantes fue el tercio de quites, como
también lo fue su faena, en la que fue volteado y corneado hasta en tres
ocasiones. Series de gran entidad sobre ambas manos, lo que unidos a su verdad
y torería pusieron la plaza a sus pies. Muy mermado de facultades, Roca Rey se
tiró a matar y amarró el triunfo con el que todo torero sueña. La Puerta Grande
de Madrid se abrió al paso de un joven novillero que pisó muy fuerte en Las
Ventas.
Plaza de Toros de Las Ventas. Un tercio de
entrada en tarde agradable. Novillos de La Ventana de El Puerto y José María
López (sexto, lidiado como sobrero), bien presentados, serios y exigentes. El
mejor, el cuarto.
Tomás Angulo: ovación con saludos y vuelta al
ruedo.
David de Miranda: ovación con saludos y
silencio.
ANDRÉS ROCA REY: OREJA Y OREJA. SALIÓ A
HOMBROS POR LA PUERTA GRANDE.
Fotos: JAVIER ARROYO