Franco Salcedo sin opción deja todo en el ruedo
El día de ayer acudimos a las instalaciones de
la portátil Torokuna, donde la encontramos sucia y descuidada con las puertas
sin seguro, una pena que no le den el debido mantenimiento, en cualquier momento
puede pasar algún accidente que lo estaremos lamentando.
Se inició el paseíllo pasadas las cuatro y
media de la tarde, con un marco musical y
de caballos de paso, que alargaron la hora programada, sería bueno que
estos espectáculos o presentaciones lo realicen una hora antes de la corrida.
Se lidiaron cuatro astados disparejos en juego
y presentación siendo el toreable el corrido en tercer lugar del hierro Navarrete.
El resto manso, soso y con peligro. Sin condiciones de lidia, habiéndose
llevado el peor lote el diestro Salcedo. Causando volteretas a los dos espadas.
La madurez y el buen momento de “Alfonso de
Lima”, preparado y con condiciones de resolver la papeleta con cabeza y
toreando. Llevando la lidia adecuadamente, en su primero se llevó un susto por
confiarse en demasía ante un astado de Ramos, fue cogido por los aires sin consecuencias. Metiéndolo a la muleta corriendo
la mano, siendo rematados con pases de pecho al ralentí. Terminó rajado
buscando siempre el abrigo de las tablas, el matador porfió y saco pases de
buena factura. Metió la mano, por lo que fue premiado con justicia con una
oreja.
En su segundo de mayor condición de la tarde,
el diestro limeño lo entendió y le dio unos naturales lentos y bien rematados a
pies juntos. Se lastimó la mano izquierda por lo que no duro mucho. El matador perdió las orejas por la espada.
La raza y las ganas de Franco Salcedo, a quien
le tocó “bailar con la más fea”, un lote
infumable, feo de tipo el primero acaballado alto y descarado, siempre pegando
arreones, nunca humilló le dio una fuerte voltereta al diestro quedando mermado.
Con su segundo otro regalito de San Lorenzo, con indicios de estar acorralado,
con las pezuñas desarrolladas, feo de tipo y con embestida descompuesta siempre
metiéndose. El diestro
Franco Salcedo quedó con el hombro luxado y con
un corte en la oreja y adolorido de la cabeza. Así volvió a la cara del toro
para matarlo, con vergüenza torera, jugándosela literalmente. El juez apresuró
los tres avisos sorpresivamente y el astado fue devuelto a los corrales para
ser apuntillado.
Al término del festejo fue premiado el diestro
Alfonso de Lima con el escapulario.
APUNTE: No se contó con un
espada de reserva, siendo un mano a mano. Llevar ese tipo de ganado sabiendo las
condiciones de la plaza. No hubo personal médico ni ambulancia, siendo
trasladado el matador colombiano con un auto particular al centro médico de
Lurín, donde pasó la noche en emergencia. Teniendo el hombro lesionado ( hueso acromion luxado.)
No se puede permitir lidiar ganado en esas condiciones. ¿Dónde esta la autoridad?
No se puede permitir lidiar ganado en esas condiciones. ¿Dónde esta la autoridad?