Pitos a la empresa organizadora por la pésima
organización
El día de ayer culminó la feria del Dulce
Nombre de Jesús con una tarde fatal, mire por donde se le mire, por la
falta de organización, así no se pueden dar espectáculos y encima cobrar, con
una serie de irregularidades. No se cumplió con el horario anunciado, un
juez improvisado, desorden en el ruedo por los subalternos, un toro salió a las afueras de la plaza, al ser desembarcado directamente del camión, por no enchiquerarlo, creando pánico por los asistentes, etc, etc
Desde su inicio a las cinco de la tarde, con
una autoridad improvisada que no supo llevar la tarde, permitiendo una serie de
irregularidades y haciéndose faltar el respeto por un coleta.
Salió por delante el joven matador “El Yeta”,
faltando el orden de lidia, con poco oficio, luego de que le dieran al astado innumerables pases demás, después de la pica quedándose parado, por lo que el joven matador no tuvo tela
que cortar, estando fatal con el acero escuchando los tres avisos, sin hacer
caso volviendo a intentar a matar.
En segundo salió el rejoneador español Miguel
Callejón, el astado no estuvo preparado para rejones, teniendo los pitones con
filos cortantes, propinándole una fortísima cornada al caballo, hubo un gran
desorden por parte de los subalternos, el rejoneador tuvo que cambiar de
caballo y se descabalgó desconcertado por lo ocurrido. El burel tuvo que ser
apuntillado. El tercero corrido para el mejicano “El ´Poeta” lo soltaron irresponsablemente
directamente del camión, pudiendo desembarcarlo a los chiqueros con tiempo,
éste saltó (no se escapó) y salió suelto para las afueras del coso, creando un
pánico para la afición asistente, hiriendo a dos personas, a las finales
tuvo que ser sujetado con soga para ser apuntillado por un subalterno.
Ya con poca luz, salió el último de la tarde
donde nuevamente salió el peruano El Yeta, creando malestar por los asistentes,
levantándose de sus asientos y retirándose del recinto.
Una lástima recibir llamadas de aficionados
indignados de ver un espectáculo vergonzoso para su tierra, falta de
profesionalismo de los coletas, los subalternos faltos de oficio y poco
respeto al rito del toreo. La empresa estuvo a cargo de Carlos Sánchez. Esperamos
que las autoridades tomen cartas en el asunto para evitar estos bochornosos
espectáculos en otras plazas.