martes, 3 de mayo de 2011

ENRIQUE MENDEZ CORTA DOS APENDICES EN TRUJILLLO

Oreja de peso para Antonio Bricio por su valor y entrega. Reyes y El Yeta ovacionado
Crónica: José Acevedo – Trujillo Toros Fotos: Celso Roldán M. / Guillermo Nieto Polo
El 1 de Mayo marcó el inicio de la temporada taurina 2011 en la ciudad primaveral de Trujillo donde hubo un fuerte viento, principal enemigo de los coletas, que impidió un mejor resultado artístico. El paseíllo se inició al promediar las 4.30 de la tarde ante poco más de tres cuartos de plaza. Hubo picador (aunque no utilizó castoreño), tiro de arrastre y actúo como juez de plaza el fotógrafo taurino Walter Castro. Se guardo un minuto de silencio en memoria del empresario y aficionado trujillano Jerónimo Campos, padre del matador Antonio Campos, quien falleció en horas de la mañana.
“TIMADOR” fue el pupilo de La Laguna que abrió plaza y tocó en suerte al novillero trujillano Enrique Méndez trajeado de grana y oro. Recibió alegremente a su antagonista con verónicas rematadas con una revolera, pero el animal acusaba debilidad en los remos delanteros, se dolió en el caballo y hubo que cuidarlo más de la cuenta para el resto de faena, ya con los palos, Méndez logró colocar uno en todo lo alto ovacionado por el respetable, brinda al empresario Luis Montalván la muerte de su novillo y luego recibe una cerrada ovación en los medios. Intenta un pase cambiado por la espalda, pero por el viento queda descubierto lo que ocasiona un fuerte achuchón sin consecuencias mayores, vuelve a la cara del astado y logra hilvanar una serie de derechazos rematados con el de pecho, luego de esto el animal se rajó y hubo que sacarle de uno cada uno de los muletazos, uno que otro molinete y a ponerlo en suerte para matar, deja un espadazo ligeramente delantero de rápido efecto lo que le vale dos orejas.
César Bazán “El Yeta”, vestido de concho y vino y oro con remates turquesas, inicia su faena con el percal con dos largas cambiadas pasando algún apuro, continúa su labor con el capote con una serie de verónicas rematadas con una media para llevarlo luego al caballo, el novillo recibe poco castigo debido a la escasa fuerza y se cambia el tercio. “BAILADOR” ya en el tercio de banderillas solo recibe un par ejecutado por el subalterno trujillano Ronald Sánchez en todo lo alto y empieza a acusar debilidad por lo que se cambia el tercio. Bazán brinda a Luis Montalván e inicia su faena en el último tercio cogiendo el olivo con muletazos por alto rematados con el de pecho, el animal se raja y empieza a sacarle uno a uno los muletazos, siempre por la derecha, una serie de manoletinas ceñidas y entra a matar dejando en el primer viaje una estocada ligeramente caída que no hizo efecto pero si lo haría la ejecutada en su segundo intento. El novillo dobla y da una merecida vuelta al ruedo como premio a su entrega.
El tercero de la tarde de nombre “TRONCO” le tocó en suerte al torero mexicano Antonio Bricio, elegantemente trajeado de verde botella y oro, recibió a su antagonista a portagayola conectando rápidamente en los tendidos, una serie de verónicas rematadas con la media y luego una revolera, el animal lo aprieta y luego hace pasar apuros a Julián Mariños quien es apretado contra las tablas sin consecuencias que lamentar. El toro recibe un excelente puyazo por parte de Joseph Rojas Grados y luego su matador realiza un quite por navarras rematado con la serpentina. Ya con la muleta, inicia su labor al filo de las tablas con muletazos por alto, el toro empieza a despertar sentido pero Bricio fiel a su estilo se jugó la vida literalmente cruzándose y dejándose ver por el izquierdo y a base de pundonor pudo sacarle embestidas a Tronco, que hizo honor a su nombre quedándose parado y estando pendiente siempre del matador hasta que lo prendió de la taleguilla y le dio un fuerte varetazo en el muslo izquierdo, el mexicano siguió en la cara del animal y luego de robarle una tanda por la derecha preparó la suerte suprema pinchando en todo lo alto primero para dejar una ración entera del acero, algo tendida, que hizo rodar al astado sin puntilla, oreja de peso, ganada gracias al valor demostrado en el ruedo, el público le brindó una ovación cerrada en su vuelta al ruedo.
En el que cerró plaza, tocó en suerte al trujillano Antonio Reyes, puso toda la carne en el asador y no quiso dejar ganarse la pelea al iniciar su faena de capote con una larga cambiada para luego llevar hacia los medios al astado con la verónica rematada con la media. El toro se quedaba parado, en el caballo acudió y dio pelea. Ya con los palos, Reyes demostró tener condiciones y dejó el primero en todo lo alto y el segundo lo colocó al violín recibiendo la eufórica respuesta desde los tendidos. A pesar de las condiciones del astado, Antonio derrochó valor e inició su faena con las rodillas en tierra, logrando hilvanar una serie de derechazos rematados con el de pecho lo cual calentó las graderías. Por la derecha el burel empezó a quedarse parado y le iba sacando de uno los muletazos. Entro a matar, pero lamentablemente no estuvo fino con el acero, por lo que tuvo que irse de vació luego de dar por culminada la vida del astado con el descabello.
Enrique Méndez abrió la puerta grande y salió a hombros.
Buen inicio de la temporada, que esperamos sea un aliciente para impulsar la fiesta en nuestra ciudad.
Punto aparte es el derroche de entrega de Antonio Bricio, torero mexicano que viene realizando campaña en el Perú con sendos triunfos en diferentes plazas pero lamentablemente esto no es valorado por las empresas en México y está siendo postergando y no le brindan la oportunidad que se merece el correcto matador; así nos indicó su apoderado Alejandro Arrieta “El Tata”.
Ficha.- Día domingo 1 de mayo del 2011. Plaza de Toros de Trujillo, casi lleno.
Enrique Méndez: dos orejas. César Bazán “El Yeta”: vuelta al ruedo. Antonio Bricio: oreja. Antonio Reyes: ovación.