Terna es premiada excesivamente por la
autoridad
JOSE ANTONIO CUCHO
Con los tendidos abarrotados y con cierta
demora se desarrolló la tradicional tarde taurina en “La capital de las
hortalizas”, Palcamayo en su versión 2016.
Manolo Muñoz (Una oreja en el primero de su
lote y dos en la segunda), vestido de celeste y oro abrió plaza demostrando
buenas maneras con el capote y muleta logrando sacarle partido al de “San
Alejandro”. Ya en su segundo con más contundencia, ovación y los olés en los
tendidos demostró dominar muy bien los tres tercios sobre todo con las
banderillas a lo que el aficionado supo responder con fuerte ovación, en la
espada estuvo muy acertado logrando despedir al de “San Alejandro” de nombre
“Laborioso” con el número N° 183 al que desorejó permitiéndole alzar como el
triunfador de la tarde con tres apéndices y haciéndose del escapulario en Honor
a San Cristobal” de Palcamayo en su versión 2016.
Paco Céspedes (Una oreja en cada toro), vestido
de canela y azabache no pudo hacer más que abreviar en su primero de “San
Alejandro”; en su segundo anduvo mejor recibiéndolo con una larga cambiada que
alboroto a todo el aficionado ya que desde su salida el de “San Alejandro”
derrotó todos los burladeros logrando quebrar dos de ellos, el ganado con mucho
movimiento ante la pica seguidamente muy bien con las banderillas donde
permitió el lucimiento de los banderilleros destacando entre ellos José Antonio
Vera “Verita” y Pedro A. Jorge Valdéz en la suerte suprema como siempre estuvo acertado logrando
quitarle las dos orejas al de “San Alejandro” N° 176 de nombre “El aventurero
de Chancayllo” y recibiendo fuerte ovación en los tendidos.
David Esteve (Dos orejas en el primero y
silencio en el último) con traje guinda azabache le puso el arte español para
torear a lo que al primero de su lote le logró quitar ambas orejas y recibir
ovación; ya en su segundo logró templar capotazos de buena factura poniendo
todas las carnes en el asador por momentos el de “San Alejandro” demostró
mansedumbre a lo que el torero supo sacar partido entregándose y cuajándole
buena faena pero con el acero no anduvo acertado ya que demoró en caer
escuchando un aviso.