Cortó cuatro orejas y un rabo!
“El Fenómeno ROCA REY” puso de cabeza aplaza
de toros Ambato en primera de feria; cortó cuatro orejas y un rabo. Hinojosa una y Adame otra.
Por: Manolo Espinosa “El Ciclón”
Fue una tarde con cielo entoldado que
amenazaba lluvia, pero con un cartel de
figuras que anunciaba verdaderas tempestades.
Teniendo esta composición explosiva con Joselito Adame, torero azteca
que venía triunfando en la plaza más grande del Mundo la monumental México -en ese mano a mano histórico con José Tomás
en el que cortó dos orejas-; Andrés Roca
Rey, diestro peruano con halo de figura del toreo, al que
difícilmente se le escapan los triunfos y que había creado profunda expectativa en los aficionados del
país, sumándose nuestro paisano Juan Francisco Hinojosa que siempre sale a disputarse las palmas y con verdadero
afán tras los triunfos, entonces, qué se podía esperar con esa mixtura sino un
remezón.
Se registró un ingreso cercano a los tres
cuartos de plaza –muy poco para semejante cartel- pero fue una tarde en que se
cumplieron las intuiciones de muchos aficionados que veían venir un triunfo, que casi resulta redondo, de no ser porque los toreros no fueron finos con la espada. El ganado en general fue toreable, aunque el
cuarto no tuvo transmisión y el quinto
que produjo división de opiniones al
arrastre. El sexto fue el mejor de la
tarde que originó el grito de indulto y bronca
a la presidencia.
Juan Francisco Hinojosa.- El compatriota salió decidido y a por todas.
Mostró estar cuajado y con madurez profesional, además de solvencia y mucho
valor. Recibió a “Mañoso” de Mirafuente,
saludándolo con verónicas y delantales ceñidos, rematados con una media, siendo fuertemente ovacionado.
Con la muleta desplegó, conocimiento y
oficio, amén de momentos de arte y exponiéndolo todo. Buenas tandas con
la derecha e izquierda que calaron en el público. Desplante y adornos, entrando
a matar y recibiendo ovación a su labor, aplausos al toro. En el segundo de su lote
puso mayor casta, recibiéndolo con una larga cambiada, verónicas, delantales,
rematando con una media verónica y revolera. Quite por tafalleras y fue al
tercer tercio, brindando la muerte de este astado al “Tortuga”, subalterno
nacional que se retiró de los ruedos.
Con la muleta fue más expresivo y voluntarioso, recibiendo a su
antagonista con un cambiado por la espalda, pases por alto, el toreo
fundamental con derecha e izquierda, adornos y
fue por uvas consiguiendo un espadazo poquitín desprendido, logrando
cortar una oreja. Hinojosa fue muy ovacionado
y el toro aplaudido en el
arrastre.
Joselito Adame.- Diestro mexicano que venía
precedido de un éxito hace ocho días, en
el mano a mano con José Tomás;se hizo cargo de dos toros de Mirafuente:
“Gacela” y “Malalengua”. Su primero un
toro repetidor, le instrumentó cinco
buenas verónicas y remate con una media.
Con lo muleta estuvo emotivo, ejecutando
varias tandas con derecha e
izquierda, consiguiendo fuerte
ovación. ; Desplante soltando la
muleta, entró a matar consiguiendo un
espadazo de efecto letal. Cortó una
oreja y aplausos a los despojos del toro.
En el segundo de su lote y con la capa saludo con delantales que fueron jaleados, rematados con una larga
cordobesa y quite por
Zapopinas. En el último tercio trasteo por
bajo para continuar con derecha e izquierda entonando el buen toreo. No
consiguió el triunfo pero fue muy aplaudido y el toro pitado.
Andrés Roca Rey.- Joven matador del Perú, esperado por la afición ecuatoriana
luego de sus grandes triunfos en todas las plazas, le correspondió un lote con
“Trajeguapo” de Mirafuente e “injuriado” de Vistahermosa. El primero algo soso en la
embestida, que no lució las cualidades requeridas para un triunfo, sin embargo
el torero hizo de las suyas atornillando las zapatillas y moviendo solo los
brazos como lo dijo: Pedro Romero. Todo
lo que hizo fue sensacional: toreo lento, con clase, vistoso y con
sentimiento. Con capa como con muleta
impresionó al respetable que pidió las
dos orejas y aplausos al toro. En el
segundo, la labor fue superior, engolosinándose en su toreo que caló hondo en
los tendidos y haciendo que la corrida rompiera. El público puesto de pie pedía a rabiar el indulto que la autoridad no concedió. Entro a matar consiguiendo un sopapo que le
valieron las dos orejas y rabo y vuelta al toro en el arrastre. Roca Rey salió a hombros entre un público
delirante.