Ganado deslucido, pequeño y falto de casta Estuvimos presentes en las dos tardes en la localidad de Palcamayo - Tarma, siendo sorprendidos por el lleno en los tendidos, no podemos ocultar el sol con un dedo, nos llevamos un sabor agridulce por no ver a la piedra angular de la fiesta brava que es el Toro!, sabemos el gran esfuerzo que realizan las comisiones de fiestas para montar durante todo un año sus corridas, pero no podemos dejar de lado la falta de seriedad de los “ganaderos”, que mandan becerros y quieren hacer lo que les venga en gana faltando respeto a la autoridad de la plaza. (Inpidiendo el corte de orejas ordenadas por la autoridad como no querer que salga el picador al ruedo)
De lo taurino poco podemos decir, creemos que por el bien de la fiesta, dejemos por ahora de hacer las crónicas de las corridas ya que no tenemos tela que cortar.
Lo que sí nos llevamos un grato recuerdo del buen público asistente de Palcamayo, y de la joven afición limeña que asistió a ver su espectáculo favorito, (otro día será).
De los actuantes estuvo el matador de toros Juan Carlos Cubas, y el español Juan Belda. Con el novillero venezolano Manolo Muñoz (tuvo sus documentos en regla?).
EL ganado de San Alejandro, estuvo impresentable y falto de raza, (el tener una ganadería es una ciencia y no una aventura).
De lo taurino poco podemos decir, creemos que por el bien de la fiesta, dejemos por ahora de hacer las crónicas de las corridas ya que no tenemos tela que cortar.
Lo que sí nos llevamos un grato recuerdo del buen público asistente de Palcamayo, y de la joven afición limeña que asistió a ver su espectáculo favorito, (otro día será).
De los actuantes estuvo el matador de toros Juan Carlos Cubas, y el español Juan Belda. Con el novillero venezolano Manolo Muñoz (tuvo sus documentos en regla?).
EL ganado de San Alejandro, estuvo impresentable y falto de raza, (el tener una ganadería es una ciencia y no una aventura).