Jóvenes aspirantes salvaron la tarde
El día de ayer, se llevó a cabo el festejo taurino en la plaza de toros Yawar Toro ubicado en el distrito Puente Piedra-Lima con 3/4 de entrada, donde alternaron los matadores Curro Rodríguez de Ecuador y Octavio Chacón de España, y por el lado de los jóvenes actuantes de distintas escuelas que se disputaban el escapulario Santísima Cruz de Mayo, Venturo Rivera, Gustavo Rivera y Samuel Calderón que lidiaron 3 vaquillas y dos toros pertenecientes a la ganadería San Roque, siendo las 4 arrancó la jornada con un baile de marinera para luego dar pase a la tarde de toros.
Venturo Rivera |
Gustavo Rivera |
Samuel Calderón |
El primero en salir fue Venturo Rivera ante una vaquilla que se dejó con el capote, saliendo al quite por chicuelinas Gustavo Rivera, brinda al público, para luego realizar una buena serie de naturales hasta que la vaquilla no da más concluyendo la faena y recibiendo palmas del respetable.
La segunda vaquilla correspondía a Gustavo Rivera, la cual llamaba la atención por la falta de uno de sus pitones, el español lo prueba con el capote, la vaca va bien, luego se estrella y pierde otro de sus pitones, Gustavo Rivera toma la muleta y realiza una buena faena que es premiada con palmas del público.
La tercera vaquilla, perteneciente a Samuel Calderón, una vaca muy difícil ya que se colaba buscando el cuerpo de Samuel Calderón, lo recibe por dos largas cambiadas, al joven diestro se le ve deseoso de triunfo pero la vaca le impide realizar una buena faena aunque logra sacarle unos pocos muletazos.
Los 3 jóvenes diestros son premiados con la vuelta al ruedo, siendo muy aplaudidos por el público.
El primer toro de muerte es para el ecuatoriano Curro Rodríguez, que lo lleva bien con el capote, Octavio Chacón sale en quites por tafalleras, y el ecuatoriano hace la réplica y realiza quite por chicuelinas, pide banderillear colocando dos buenos pares de banderillas, para luego brindarle el toro a Rafael Montenegro, con la muleta el toro va bien consigue sacarle buenos pases y torear en redondo, al matar falla, pincha un bajonazo que hiere fuertemente al toro y hace que caiga rápidamente.
Con el que cerraba plaza, Octavio Chacón intenta torear con el capote, pero el burel era difícil de torear ya que el animal pasaba, pero buscaba el cuerpo, es cambiado y en su reemplazo sale un manso que huía del capote y de todo lo que veía, el español se niega a torear y matar al toro, por lo que el animal queda solo en el ruedo generando bronca en un sector del público que no se explicaba lo que pasaba, los diestros con sus respectivos subalternos intentan retirarse del ruedo mientras intentaban guardar al toro en el camión, pero un grupo de organizadores se niega a que estos salgan pidiendo una explicación, finalmente los diestros salen . Y se da por concluida la tarde.
El juez Carlos Castillo y su grupo de asesores decide otorgarle el escapulario de la Santísima Cruz de Mayo al joven Gustavo Rivera, el que posteriormente es paseado en hombros.