lunes, 23 de noviembre de 2015

TARDE ENTRETENIDA EN EL III FESTIVAL DE LA TRADICIÓN

Emotiva tarde de toreros que entregaron todo
El pasado sábado se realizó el III Festival de la Tradición en homenaje a don José Alfredo Bullard, con una emotiva ceremonia y una tarde muy entretenida, con poca asistencia, saltaron al ruedo novillos de tres hierros, con distintos comportamientos, sin embargo se vieron detalles taurinos como derroche de valor por parte de los actuantes.
Abrió plaza el matador de toros español Emilio Serna quien no tuvo suerte con “Abrecaminos” de la ganadería Villagraciela, el más hecho sin embargo no tuvo motor, mansurrón sin dar un buen juego al que le tuvieron que poner banderillas negras, por las pocas condiciones. El matador estuvo con mucha voluntad, despachó al novillo con  una media estocada al tercer intento recibiendo palmas del público asistente.
Las ganas de José Ignacio Bullard, torero aficionado a quien lo recibieron con cariño el público asistente, emotivo brindis para sus hijas, dio pases aislados también no tuvo suerte de Toto Chirinos, manseó y se revolvía pronto, tras el segundo intento cae el novillo, palmas.
José Alfredo Koechlin, recibió con un buen saludó la verónica a del “El Olivar”, rematando con una buena media. Con la muleta tuvo buenos momentos que caló a los tendidos sonando la música, el novillo se aquerenció, deja media estocada al segundo intento, recibe el reconocimiento del público con una fuerte ovación.
Carlos Allende (México),  no se acopló con el novillo, al que se le colaba por el pitón derecho, pases aislados. Silencio
Raúl Aramburú, fue arrollado al recibir con una larga cambiada al de Villa Graciela, volvió a la cara, brinda a su familia, inicia su faena con empaque, rematadas con las de pecho que hace sonar la música. Vuelta al ruedo.
Juan Sebastián Roldán (Ecuador), con muchas ganas, conecto a los tendidos por su entrega, y lances bien rematados. Fue cogido sin consecuencias, volvió a la cara y dejó unas dos series que agradaron con el acompañamiento de la música, se entregó matando y cortó una merecida oreja.

La entrega de Enrique Sifuentes, sorprendió por su gran arrojo, fue cogido sin embargo no se inmutó, emotivo brindis a su heredero, dio lances sueltos, sin embargo recibió el cariño del sensible público de Lima, dando una aclamada vuelta al ruedo.
Enhorabuena a los organizadores, y a todos los alternantes por cumplir y apoyar a una noble causa como disfrutar de una tarde de toros.